Desde el principio de los tiempos el ser humano ha buscado en su medio natural los recursos naturales necesarios para paliar las debilidades físicas de nuestra maravillosa máquina vital. El nacimiento del hombre se produjo al mismo tiempo que el de la enfermedad, por ello curanderos, charlatanes, sanadores, chamanes y brujos, compusieron el mapa antropológico e histórico de la medicina durante siglos, hasta que la ciencia y la farmacia comenzaron a evolucionar siguiendo el rastro dejado por los sabios de aquella medicina primigenia.
Gracias a ello nuestra expectativa de vida ha crecido exponencialmente pero no siempre la medicina tiene respuesta y solución para todo, por lo que ofuscados por la desesperación, buscamos en la superchería, la religión y la fe, el brebaje y la pócima milagrosa para nuestros males. Y en este pantanoso terreno en el que la razón se nos escapa entre los dedos y en el que algunos indeseables hacen negocio de nuestra desesperación, (y en muchos de los casos incultura) encuentro uno de los elementos más recurrentes y socorridos de la historia del deporte y el fútbol: el agua milagrosa. Elemento milagroso a través del cual quisiera introduciros en la carrera legendaria de una figura poco reconocida, que a la sombra del médico y con una botella de agua milagrosa y linimento Sloan “El tío del bigote”, ejerció como sanador de los grupos musculares del deportista por los campos de fútbol de todo el planeta. Continúa leyendo El agua milagrosa y los tres tiempos del fútbol.